Cam Smith siempre encuentra la forma de aportar algo de luz en la desesperación. Su regreso como Hotel Books no podía ser menos. Mientras que él sigue tan perdido emocionalmente como siempre, su banda se encuentra en un ambiente mucho más pop que de costumbre.
Esto es debido porque lo que a menudo podría describirse como un “proyecto creativo” centrado en la poesía de la palabra hablada (spoken word para entendernos), “Equivalency” llega centrado más en el sonido de la música como arma para equilibrar el lirismo desgarrador de Cam.
El pináculo de esta progresión viene con la salida del pop-punk del single “Celebration“. Una canción que rompe la hasta ahora dimensión no explorada de Cam, deconstruyendo el proceso de composición junto con el eficaz gancho: “Espero que estés feliz mamá, escribí una canción feliz“.
Un enfoque nuevo para el proyecto, que se repite a lo largo de “Equivalency” con estructuras y patrones más firmes en todas las canciones, creando algunas como “Van Nuys” y “Violent Smile” en lugar de las narrativas sinuosas como la del emotivo “Where I Am“.
Líricamente, Cam se enfrenta a las mismas batallas sobre el amor, ya sea en su religión o en su vida romántica, con la incómoda sensación de escuchar esas emociones tan expuestas. Pero de alguna manera, sigue encontrando la forma más bella de describir la desesperación.
En esa honestidad, en esas referencias y desgarramientos específicos, existen los mismos defectos que Hotel Books siempre ha tenido, y que hasta ahora hemos aprendido a aceptar por la magia que tiene al hacernos pensar. Ocurre en “With Love“, una canción que elimina esa personalidad y se centra en la historia de dos ex amantes.
Si a todo ello agregas las voces invitadas de Chase Huglin y Chris Bernstorf, y la presencia de la banda en este álbum, parece que Hotel Books ha crecido sin que apenas hayamos podido asimilarlo. Obvio que todavía no es perfecto, pero de alguna manera agrega color a sus sombrías escenas.
