Otro día más, otra de nuestras bandas preferidas publicando nuevas canciones. Después del choque, temor y confusión de Fall Out Boy, y la dulce y controvertida “Hard Times” de Paramore, el primer adelanto de lo nuevo de PVRIS es menos White Noise de lo que esperábamos pero más de lo que temíamos que pudiese cambiar.
Sólo hace un año desde que la banda fijara ese punto de inflexión entre “White Noise” y esta nueva etapa con “You & I“, pero en esos doce meses las cosas han cambiado. En lugar de preservar un sonido y aguantar el tirón, PVRIS se han aventurado a hacer una de sus canciones más opuestas y feroces hasta la fecha.
No es que el sonido cambie en exceso, no me refiero a eso sino a algo más inteligente. A diferencia de la mayoría de bandas, PVRIS no están interesados en un cambio directo. En algo que les solucione los próximos años. En lugar de apostar por ello, Lynn, Alex y Brian lo han hecho por la narrativa, el capítulo, el verso y la imagen más grande. “Heaven” no está hecha para enseñar una nueva cara sino para volver a parpadear la escena.
Es una maravilla para mover poesía, para descubrir secretos. Las sombras, las tonalidades rojas, los monstruos en la oscuridad. A través de “Heaven” y su significado se vislumbra el atisbo a un mundo nuevo, el tentador deseo de explorar.
Por supuesto, “Heaven” es tan cinematográfica como PVRIS suelen ser, negándose a encender la luz. El espejo estrellado y la visión distorsionada marcan nuevos ángulos, lados e ideas que marcan un nuevo comienzo. PVRIS juegan una vez más con la tensión y la espera, pero “Heaven” se eleva y cae al mismo tiempo. Después de todo, PVRIS están empezando de nuevo a marcar el ritmo.
Hay confianza, mucha, “Heaven” lo sabe y utiliza su profundidad para moverse rápido. Su mundo, sus reglas. Bienvenidos a la nueva era.